Al igual que en nosotros, el cuerpo de tu mascota debe realizar un proceso de adaptación al nuevo cambio de temperaturas que está por ocurrir en nuestro ambiente.

Entre estos cambios están

1.- Cambio en el pelaje

Cambio en el pelaje, donde notarás un proceso de “pelecha” al igual que en primavera, en el cual aumentará la cantidad y el grosor del pelo, con el fin de mantener el calor del cuerpo. Además, si bien las garrapatas comenzarán a desaparecer hasta el próximo verano, comenzaremos a ver un aumento de otros parásitos como son las pulgas y los piojos.

2.- Vías Respiratorias

Las vías respiratorias podrían verse afectadas, debido a que el frío modificará su equilibrio favoreciendo la entrada de agentes virales y bacterianos, con lo cual podrían presentarse signos como tos, estornudos y secreciones. Una de las enfermedades más comunes que aumenta en este periodo es la llamada "Tos de las Perreras" (traqueobronquitis infecciosa), además de otros virus que podrían sobrevivir en el medio ambiente por periodos prolongados en época de bajas temperaturas como por ejemplo el virus del distemper canino.

3.- Almohadillas Plantares

Las almohadillas plantares son como “SÚPER ZAPATOS” de nuestras mascotas, si bien evitan muchas lesiones en sus patas, también podrían verse afectadas por el frío y humedad de la época, contaminándose con microorganismos como hongos o bien agrietarse por factores físicos.

4.- Alimentación y Apetito

Otro cambio no menos importante, es que verás modificaciones en su rutina de alimentación y apetito. Principalmente debido a que al disminuir la temperatura medioambiental, su cuerpo necesita aumentar la producción de calor, lo cual se logra consumiendo más calorías.

MEDIDAS A TOMAR

1.- Higiene

No descuides la peluquería, si bien necesitan más pelo, será necesario retirar el pelo remanente de la pelecha para evitar que no se ponga de mal olor debido a la humedad. Además las mascotas de pelo largo acumularán más motas que aumentan la humedad en la piel favoreciendo la aparición de hongos.

2.- Desparasitación Externa

En cuanto a la desparasitación externa, recordar siempre el efecto protector de Frontline ®, el cual en otoño e invierno se pueden comenzar a utilizar cada tres meses, como efecto protector y residual para pulgas y piojos. Recordar además que las pulgas portan parásitos como las TENIAS (Echinococcus granulosus y Dipylidium caninum) que pueden afectar a los humanos. Por esta razón siempre tratar de desparasitar interna y externamente de manera regular y simultánea.

3.- Vacunas

Para proteger a nuestra mascota de la TRAQUEOBRONQUITIS INFECCIOSA CANINA, existe una vacuna utilizada a nivel mundial que disminuye la posibilidad de contagio o bien disminuye los signos clínicos graves de la enfermedad. Los signos que puede observar son desde una tos seca y persistente, cambios en el tono del ladrido y secreciones nasales. Otra vacuna importante de tener al día en este periodo es la vacuna ÓCTUPLE, que previene entre otras, el Distemper Canino.

4.- Almohadillas Plantares

En cuanto a las lesiones que pueden provocarse en las almohadillas plantares no hay mucho más que hacer que mantener a la mascota en un lugar seco y mantenerlo en observación cada cierto tiempo por posibles cojeras o lamidos frecuentes. De forma preventiva se debe cambiar y lavar su lugar de descanso (mantas, camas, casas, etc.)

5.- Tercera Edad

Si tu perro es de la tercera edad (más de 7 años) es importante que fabriques un lugar cómodo y abrigado para las horas de sueño, puesto que será más sensible a las bajas temperaturas provocándole por ejemplo dolores y malestar físico.

6.- Alimentación

En cuanto a la alimentación, verás una diferencia entre las épocas frías y cálidas. En las épocas frías, tu mascota comerá con normalidad en las horas en que le sirves su alimento. Mientras que en verano, solo comerá cuando no tenga calor.

Por esta razón es importante considerar que si bien requerirán mayores volúmenes de alimento, esto en exceso, puede perjudicar su salud por un aumento de su peso.

En el caso de observar signos de enfermedad, acude a la clínica veterinaria o llámanos. Recuerda que por ningún motivo es recomendable automedicar a tu mascota.