Las fiestas de fin de año significan celebraciones y buenos momentos para muchos de nosotros, pero para las mascotas no siempre es así.

Hay que tener en consideración todos los cambios que se pueden experimentar durante las fiestas de fin de año, como por ejemplo: llegada de visitas a la casa, juegos pirotécnicos (fuegos artificiales), asados, alimentos atractivos y a la vez prohibidos para nuestras mascotas, vacaciones y por ende viajes con o sin las mascotas, etc.

Con respecto a los fuegos artificiales hay que tener en consideración una característica especial de nuestras mascotas, y es la capacidad auditiva que tienen, la cual es bastante mas sensible que la del humano. La mayor parte de los animales tienen un aparato auditivo tan sensible, que en algunos casos son capaces de oír sonidos ultrasónicos, frecuencias inaudibles para nosotros o tonalidades que para el ser humano son normales, para ellos representa un sonido mucho mayor.

Los fuegos artificiales son muy ruidosos y el espectáculo tiende a durar un tiempo bastante considerable, lo cual produce un tipo de agresión a la audición de nuestras mascotas. Hay animales que no se asustan frente a estos ruidos, como tampoco se asustan de tormentas, truenos y demás ruidos fuertes, ya que se han habituado a esto a lo largo de su vida, pero no todos son asi y algunos pueden desarrollar fobias.

Lo ideal es controlar la situación de la mejor forma posible, siempre recordar NO AUTOMEDICAR, este problema debe ser evaluado por un profesional, ya sea por el Médico Veterinario que lo ve constantemente o bien por un Etólogo, que es una especialidad de la Medicina Veterinaria, la cual se encarga de todas las alteraciones conductuales que se pueden presentar en los animales. Alguno de ellos le indicarán cual es la mejor forma de enfrentar este problema para la su mascota, basándose en la edad, enfermedades crónicas, etc.

Es importante que el animal se sienta seguro y cómodo, pero a la vez se debe evitar las posibles vías de escape, se deben cerrar ventanas y puertas, nunca se le debe presionar ni obligar a hacer cosas que no quiere, además de NO reforzar sus estados ansiosos proporcionándole caricias… ellos solo querrán estar tranquilos.

Otro aspecto que hay que tener en cuenta es la alimentación de nuestra mascota, en ésta época es muy común preparar cenas, asados, dulces, chocolates, etc. Lo cual al igual que para nosotros, para ellos tiene un aspecto y un olor muy apetitoso formando una verdadera tentación para ellos, con lo que al menor descuido pueden comer alimentos que son perjudiciales para su salud.

Al igual que la audición, ellos presentan un desarrollo del olfato bastante más desarrollado que el nuestro, lo que hace prácticamente irresistible la atracción a ciertos alimentos utilizados con mayor frecuencia para estas fechas. Es importante que nuestras mascotas reciban una alimentación lo más equilibrada posible, por lo que no es correcto proporcionarles sobras de nuestra alimentación, así como alimentos que por su naturaleza no son bien procesados por su organismo, pueden sufrir grados de gastoenteritis, vómitos, intoxicaciones y un problema bastante frecuente de alimentaciones desbalanceadas, el sobrepeso y la obesidad.

Siempre proporcionar como dieta exclusiva el alimento diseñado para la especie, ya sea perro o gato, y obviamente agua fresca siempre disponible. Cuando queramos regalonear a nuestras mascotas, existen golosinas especialmente elaboradas para su metabolismo, ya sean galletas, huesos, cartílago, etc. De las cuales tampoco hay que abusar, pero siempre que se utilicen para un propósito determinado o bien para ocasiones especiales, harán que ellos disfruten tanto como nosotros para este período de fin de año.

Dentro de los alimentos prohibidos SIEMPRE están:

• CHOCOLATE : Las mascotas no pueden metabolizar una sustancia contenida en el cacao, denomindada teobromina, produciendo grados de intoxicación.
• HUESOS DE AVES Y ESPINAS DE PESCADO : Este tipo de huesos no se rompe de la misma forma que el de otros animales, en este caso se muele producto de la masticación pero formando pedazos de hueso con puntas, las cuales pueden provocar lesiones en alguna parte del sistema digestivo.
• ALCOHOL : El organismo de nuestras mascotas es tan sensible y a veces poco desarrollado como lo sería el de un bebé o un niño, por lo tanto el daño que les produce es similar.
• LECHE : Aunque sea el alimento de preferencia cuando son cachorros, en su etapa adulta pierden la capacidad de metabolizar la lactosa.
• CARNES SALADAS : Concentraciones muy aumentadas de sal y otros compuestos hacen difícil la asimilación, provocando diarreas, vómitos u otro problema digestivo.
• CEBOLLA Y AJO : Contienen una sustancia denominada tiosulfato, la cual dependiendo de la cantidad ingerida, puede provocar grados de anemia.
• CAFEINA : Altera el sistema cardiovascular y neurológico de nuestras mascotas
• UVAS Y PASAS : La dosis tóxica va de 11-32 gramos de pasas por kilogramo de peso corporal. En caso de superar este rango, se producen ciertos grados de insuficiencia renal.
• GRASAS Y CONDIMENTOS : Hay que tener especial cuidado con las sobras de ollas con aceites, grasas de parrillas, etc. Ya que quedan con olores y sabores de carne, lo que lo hace muy atractivo para ellos, pudiendo provocar grados de gastroenteritis hasta la muerte del animal.
• DULCES : Para animales con sobrepeso u obesidad es una carga más de calorías.
• NUECES : Tienen sustancias que algunos animales no pueden metabolizar, como en el caso del perro, produciéndose temblores musculares e incluso parálisis.

 

Por lo tanto, cualquier duda o signo de enfermedad con su mascota, no dude en comunicarse telefónicamente o de forma presencial en nuestra sucursal con atención 24 hrs en Huechuraba.